El escándalo por la supuesta herencia del departamento de la escritora Beatriz
Sarlo sumó en las últimas horas una nueva revelación.
Exclusivo: Las fotos del departamento en disputa judicial Beatriz Sarlo
Foto exclusiva de la gata Beatriz Sarlo, actualmente reclamada también
judicialmente pro el encargado del edificio
Bomberos, policía y personal del SAME se hicieron presente en el lugar,
luego de que un vecino alertara sobre el fuego en el departamento de
Beatriz Sarlo (Foto: Prenoticia)
La policía intentó contactarse con los vecinos de los departamentos continuos. “Los bomberos tocaron puerta por puerta para saber si alguien más había visto algo. Fue un momento tenso”, contó una vecina del primer piso, y que agregó: “El olor a quemado era fuerte”.
A pesar del susto, la gata siguen estando bien. Sigue asomándose en la misma ventana de siempre. Las imágenes que obtuvo Prenoticia muestran a la mascota muy tranquila. Los vecinos aún no entienden bien quién vive o quién cuida el lugar. Algunos creen que el encargado del edificio sigue teniendo acceso, otros sospechan que hay alguien ocupándolo sin autorización. Lo cierto es que el caso ahora suma un nuevo ingrediente: su seguridad.

Prenoticia obtuvo imágenes exclusivas de la famosa casa que se
encuentra en el octavo piso del edificio de la calle Hidalgo, en Caballito,
y que hoy en día se encuentra en disputa judicial.
Las fotos en las que Prenoticia tuvo acceso de manera exclusiva, se puede
observar a la gata Nini asomada por la ventana del departamento.
Según contaron a este medio, la mascota aparece casi todos los días tomando
sol. Pero no es lo único que llama la atención.

Varios residentes del edificio aseguraron que el departamento, que
legalmente debería estar cerrado hasta que se resuelva la situación
judicial, no está tan deshabitado como se creía. Incluso, algunos
dijeron haber visto movimientos frecuentes en el interior.
Pero la novedad más reciente ocurrió hace unos días y causó preocupación en todo el edificio. Una pareja, fue vista entrando y saliendo del departamento. Todo iba en silencio hasta que una tarde, un hombre quiso prender fuego unas maderas en una parrilla del balcón.
Al parecer, lo que comenzó como un intento de hacer fuego para asar, terminó mal. Las maderas comenzaron a prenderse fuego de forma descontrolada, y el humo se hizo visible desde el piso inferior. La vecina de abajo, alertada por las llamas, no dudó y llamó a los bomberos.
Mientras tanto, el joven se encontraba en ese momento en el edificio intentó calmar la situación. Con un balde de agua logró apagar el fuego antes de que se expandiera. Pero la alarma a los bomberos estaba activada. En minutos llegaron al edificio una dotación de bomberos, patrulleros y una ambulancia.
“No es que está vacío. Se ven luces prendidas. A veces entran y salen
personas”, explicó una vecina a Prenoticia que prefirió no dar su nombre.
Otro vecino recordó que durante el verano, un hombre salía a
secarse en toalla a la ventana.
Pero la novedad más reciente ocurrió hace unos días y causó preocupación en todo el edificio. Una pareja, fue vista entrando y saliendo del departamento. Todo iba en silencio hasta que una tarde, un hombre quiso prender fuego unas maderas en una parrilla del balcón.
Al parecer, lo que comenzó como un intento de hacer fuego para asar, terminó mal. Las maderas comenzaron a prenderse fuego de forma descontrolada, y el humo se hizo visible desde el piso inferior. La vecina de abajo, alertada por las llamas, no dudó y llamó a los bomberos.
Mientras tanto, el joven se encontraba en ese momento en el edificio intentó calmar la situación. Con un balde de agua logró apagar el fuego antes de que se expandiera. Pero la alarma a los bomberos estaba activada. En minutos llegaron al edificio una dotación de bomberos, patrulleros y una ambulancia.

La policía intentó contactarse con los vecinos de los departamentos continuos. “Los bomberos tocaron puerta por puerta para saber si alguien más había visto algo. Fue un momento tenso”, contó una vecina del primer piso, y que agregó: “El olor a quemado era fuerte”.
A pesar del susto, la gata siguen estando bien. Sigue asomándose en la misma ventana de siempre. Las imágenes que obtuvo Prenoticia muestran a la mascota muy tranquila. Los vecinos aún no entienden bien quién vive o quién cuida el lugar. Algunos creen que el encargado del edificio sigue teniendo acceso, otros sospechan que hay alguien ocupándolo sin autorización. Lo cierto es que el caso ahora suma un nuevo ingrediente: su seguridad.
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